Se vienen las vacaciones de invierno, y en Cabriolet te contamos cómo cuidar tu vehículo en las bajas temperaturas
Los automóviles también padecen las bajas temperaturas, por eso es mejor tomar los recaudos necesarios para evitarte futuros dolores de cabeza. Hacer chequeos al auto como indica el manual, tales como revisar la batería, cambiar el aceite y el refrigerante, verificar que el termostato funcione correctamente y chequear el estado de las correas y mangueras son algunas de las tantas tareas que hay que realizar para evitar sorpresas y quedar a pie en pleno invierno. El clima frío puede llegar a afectar básicamente algunos elementos como: las llantas, piezas que se oxidan, algunos fluidos del motor, la carrocería y en específico la pintura, la cual solemos cuidar mucho.
Tips para cuidar tu auto en invierno
- Dejar tu auto en una cochera techada: Durante una noche de lluvia, es recomendable dejar el auto en una cochera techada debido a que la lluvia puede llegar a ser perjudicial. No obstante, la lluvia deja unas pequeñas marcas blancas en la pintura debido a que el agua al secarse deja un poco de sal y suele ser corrosivo. Por este motivo, tenemos que lavar el auto y al menos echarle cera una vez al mes. Asimismo, la húmedad suele ser un gran enemigo en esta época ya que puede afectar el interior del vehículo, debido al polvo que absorbe con mayor facilidad y el deterioro que se puede presentar posteriormente.
- Revisión de la presión de las llantas: Con las bajas temperaturas, las llantas de los vehículos también sufren una caída de presión (aproximadamente 0.5 bar por cada variación de 10°), esto conlleva a que la conducción se vuelva más insegura y provoque un mayor consumo de combustible. Por eso para cuidar tu vehículo en Invierno, te aconsejamos vigilar siempre que la presión de tus neumáticos sea la correcta.
- Calentar el motor antes de salir: No trates de calentar tu coche acelerando en neutral antes de arrancar. Con los autos de ahora ya no es necesario hacer eso y al contrario, puedes dañarlo. Si crees que es necesario calentarlo, préndelo uno minutos antes de que salgas, nada más.
- Respetar los límites de velocidad: Es de suma importancia respetar los límites de velocidad, en especial en las carreteras, ya que en invierno es muy común que la niebla sea más densa y esté más cerca del suelo.
- Verificación disco de frenos: Los discos de frenos están expuestos y, al ser generalmente de hierro, el agua y la humedad hacen que se vayan oxidando, generando un aumento de esfuerzo del sistema para detener el auto. Por tal motivo, si al frenar notas que no lo hace de manera adecuada o se va hasta el fondo el pedal, llévalo inmediatamente a un taller mecánico para que puedan hacer el mantenimiento respectivo.
- Revisión de luces del vehículo: Por lo general, en el invierno se genera mucha neblina que puede afectar la conducción. Si bien en la ciudad es más fácil sobrellevarla, en las periferias y las carreteras puede que la visibilidad se reduzca; por tal motivo, es bueno siempre darle una revisión a todas las luces del vehículo para verificar su correcto funcionamiento.
- ¡Precaución!: Por último y más importante, no hay nada mejor que ser precavido a la hora de manejar. Con este clima las pistas pueden estar húmedas y al frenar de golpe las llantas pueden patinar. Recordemos que en algunos casos las pistas pueden estar inundadas y pueden cubrir baches que posteriormente generan deterioros en el auto o inclusive accidentes.